Nuevo perfume en el tocador

Ayer decidí ampliar mi colección de perfumes.

Normalmente me suele entrar una emoción desmedida, como supongo que os entrará cuanto compráis o conseguís algo que realmente queréis. Un nosequé que te pone una sonrisa permanente en la cara cuando vas hacia la tienda y aún mayor cuando sales de ella con el tesoro adquirido. Un nerviosismo de pensar si estarás gastando bien ese dinero, que a mí por lo menos no me sobra y la incertidumbre de si realmente es "el olor" perfecto entre todas las fragancias que pruebo.

Pues ayer no hubo nada de eso. Fue una consecuencia natural de hechos. Sin pensar demasiado y sin sentir que estaba haciendo una locura. Sin la necesidad de que la bocecita de mi interior me dijera que estaba haciendo lo correcto. Porque ya sabía que así era.

Y ya diréis, cuantas vueltas da esta mujer por un perfume... Pero es que si no lo pensara dos veces cada vez que digo "¡Uy! ¡Éste que bien huele!" ¡vete a saber cuantos tendría!

Y el elegido fue... L'Eau de L'Artisan. Ese perfume del que pedí la muestra sólo por el nombre, por la curiosidad de a qué olería el perfume de la casa de L'Artisan Parfumeur. Sin haberlo escuchado nunca ni haber leído nada acerca de su existencia. De esta manera tan tonta llegó el flechazo. Como dicen las amigas con pareja a las solteras: Cuando menos te lo esperas con quien menos te lo esperas. Así me llegó el amor, con unos acordes verdes y cítricos. Frescos pero con carácter. Como diciendo, aquí vengo yo, huelo a limón y hierba y si no te gusta no me importa. Porque verdaderamente huele a eso: cítrico y verde, y no una mezcla de los dos, no. Hueles, cierras los ojos y ahí están, los limones y la hierba, como se dice, juntos pero no revueltos.

Pero parece que no soy la única que tiene un romance él. Os pongo la crítica de Robin para Now Smell This:

"Estoy sorprendida de que no haya incluído la esencia de la casa de L’Artisan Parfumeur, L’Eau de L’Artisan, en mi artículo de Top 10 del verano. Esta fragancia de 1993 de la perfumista Olivia Giacobetti ha sido durante mucho tiempo uno de mis básicos para el calor, y uno de los pocos frascos que he drenado y repuesto de manera regular.

La salida de L’Eau de L’Artisan es luminosa y chispeante, con una fuerte verbena (Las notas: Limón, verbena, albahaca, menta, musgo de árbol, heno, alga). Notas verdes y secas interrumpen casi inmediatamente, después de esto, huele como la hierba recién cortada mojada con agua tibia, agua del mar salada. Este es el último acorde que diferencia a L’Eau de L’Artisan de otro “verdes” y “cítricos” del mercado, y hace que sea una de esas fragancias de cuando hace calor que me encanta ponerte a mitad de Febrero, cuando necesito un pequeño recordatorio de que el verano va a llegar.

Es una fragancia limpia (no lo encuentro jabonosa, pero algunas personas lo hacen) y muy fresca, pero sin una enorme “nota fresca” sintética. No es sitio para ir buscando complejidad, hace todo el recorrido en unos 15 minutos, después es esencialmente lineal hasta que desaparece, y la fijación, como con cualquier Eau de verano, no es fantástica."

Sólo un apunte. Ayer a la noche me vaporicé el brazo y hoy a la mañana todavía olía, por lo que en mí la fijación sí que es fantástica.

Hoy la iba a estrenar, pero es que con cierto retraso a llegado el gran día de sentirme cómo Carrie. La Chassé Aux Papillons siegue siendo la elegida. No es dulce como muchas decíais. Pero es una floral con mucho carácter y con un toque naïf, como creo que es Carrie. Desde el jueves ya se me han ido todas las expectativas, por lo que no creo que me decepcione. Las únicas que quedan son las de poder ver a mi querido Aidan y sentir envidia cochina por los complementos varios. Supongo que no son difíciles de cumplir.


¡Besos!



P.D.: Y si queréis más....

...de cuando decidí volver a los olores básicos.
...de cuando combatí el calor de Madrid.
...de cuando os hablé de los adictos a Acqua di Parma.